¿Cómo llamar a tu perro para que venga?

¿Cómo llamar a tu perro para que venga?

Para saber cómo llamar a tu perro para que venga debemos tener claras dos cuestiones; ¿Cuál es la palabra que hace que vengan siempre? “Toma” ¿Y cuál la que más repetimos y casi nunca obedece? “Ven”, o su nombre.

Esto tiene una explicación sencilla nuestros perros cuando oyen la palabra «toma» están seguros de que les vamos a dar algo de comer y se acerca para comérselo, sin embargo, cuando escucha «ven» o su nombre es muy probable que sea para ponerle la correa o para regañarle porque está haciendo algo mal. El perro aprende rápidamente que acudir a la llamada muchas veces le va a impedir hacer otra cosa más placentera, por ejemplo cuando le llamamos en el parque y nos le llevamos de inmediato a casa.

No acudir a la llamada es uno de los problemas más comunes. El perro parece desobedecer mucho más cuando está fuera de su entorno. Y la explicación vuelve a ser sencilla, normalmente cuando llamamos a nuestro perro en casa es para cosas agradables: darle la comida, jugar con él, acariciarle, sin embargo si lo hacemos fuera de casa las razones suelen ser muy distintas: se acerca otro perro, es hora de acabar el paseo, está oliendo algo, etc. Por lo tanto empieza a asociar la llamada con algo negativo. Acudir a la llamada siempre significa que se acaba la diversión.

Hacer que tu perro obedezca y responda a tu llamada

Lo ideal sería llamar a tu perro muchas veces durante los paseos sin razón aparente, simplemente para darle un premio, jugar con él o felicitarlo, y después permitirle que continué con lo que estuviera haciendo, así el perro entenderá que dirigirse al humano es algo que siempre resulta positivo.

La primera semana vamos a practicar en casa. Aprovecha la hora de la comida y coge un puñado de pienso. Di la palabra elegida y dale un trozo de pienso. Repite la palabra y dale otro y así sucesivamente. En este paso solo estamos haciendo una asociación entre comida y la palabra de llamada.

Es como firmar un contrato con tu perro en el que queda establecido que la palabra “ven” es igual a “toma”, es decir, siempre significará que le vas a dar comida o incluso algo mejor. La segunda semana seguimos platicando en casa, durante ese periodo de entrenamiento procura no utilizar esta palabra para llamarle en el parque, sería como romper el contrato y tendrías que comenzar el entrenamiento de cero cada vez que desobedeciera. Coge un puñado de pienso di la palabra y da dos pasos hacia atrás, si tu perro te sigue, dale la comida. Practica unas cuantas veces.

Podemos continuar trabajando en casa perro vamos a ponérselo un poco más difícil. Coge unos cuantos premios de comida y pídele a alguien que sujete el perro, no cojas la comida delante de él para que no te siga. Aléjate del perro y di la palabra “aquí”, la persona que lo sujete deberá soltarle al oír la palabra. Cuando tu perro se acerque dale la comida. Continúa practicando de esta manera desde distintas habitaciones hasta que acuda a la primera.

Si en algún momento tú perro no acude cuando escucha la palabra de llamada vuelve al paso anterior, utiliza comida más sabrosa y repasa el proceso a ver que está saliendo mal. Tendrás que repetir muchas veces el ejercicio hasta que estés absolutamente seguro de que lo haces correctamente.Una vez que veas que lo realiza muy bien en casa inténtalo en el jardín. Después puedes empezar a practicar en un sitio menos conocido para el perro ten en cuenta que ir añadiendo distracciones cada vez será más difícil, no cambies entorno hasta que la llamada sea perfecta.

Practicando la llamada en el parque

Cuando comiences a practicar durante el paseo es importante que el perro no sienta que acudir a la llamada significa la pérdida de libertad o el final del paseo. Llámalo varias veces durante el paseo, dale un premio y deja que siga jugando. No repitas más de dos veces las llamadas si el animal no hace caso. Si no viene inmediatamente no le castigues aunque estés enfadado, cuando llegue a ti acaríciale, intenta practicar otra vez con menos distracciones y dale siempre un premio por venir. Si le has pedido dos veces que venga y no te hace caso ve a por el; llamarle más veces solo le hará más sordo a tu orden.

Cada vez que tu perro oye el comando de llamada y no le hace caso el comando va perdiendo valor. Por eso es muy importante practicar este ejercicio al principio con menos distracciones asegurándonos de que obedece e ir añadiendo dificultades lentamente. No te enfades si tu perro no acude a la llamada. Acepta que probablemente las pedido demasiado o el nivel de distracciones es muy alto.

Simplemente retrocede de nivel en la escala de enseñanza y práctica una llamada menos difícil para poder volver a premiarle.

Cómo mejorar la llamada de tu perro

Lo más importante que debes conseguir es que tú perro piense que acudir a la llamada es lo más divertido, por tanto debe ir acompañado de algo que realmente le guste. Si utilizas premios de comida emplea lo que más le guste, tienes que utilizar algo realmente sabroso no  solamente el pienso que come habitualmente.

Se tú perro lo que le vuelve loco es jugar con la pelota premiale jugando a tirársela cuando acuda a tu lado. Cada vez que premias a tu perro vas ganando confianza en ti que te será de gran ayuda cuando tengas que llamarle en alguna ocasión em la que realmente necesites que tu perro acuda urgentemente. La segunda cosa más importante es que utilices una palabra clara y única para la llamada, sea cual sea esa palabra que elijas recuerda que tienes que asosciarla con el premio por acudir a la llamada.

Algunos trucos para que tu perro acuda a la llamada

Salir corriendo en otra dirección cuando le llamas puede acelerar la llamada y hacer que tu perro acuda mucho más rápido. Asegúrate de captar su atención antes de llamarle.

Si tú perro no vuelve la cabeza hacia ti cuando le hice su nombre o está ensimismado jugando con sus amigos del parque es más que probable que no acuda cuando le llames. Acércate hacia donde está, capta su atención,  dile su palabra de llamada y de unos cuantos pasos hacia atrás para que te siga, luego prémiale. Estamos enseñándole a estar pendiente de ti.

Varía los premios que le ofreces. Prueba distintos tipos de comida juegos y maneras de premiar. Recuerda que uno de los mejores premios es continuar jugando anímalo durante todo el recorrido mientras este viniendo, de esta manera vendrá más rápidamente y estará centrado en ti.